Una característica principal del TEA (trastorno del espectro autista) es no mirar a los ojos, los niños con este síndrome hacen menos contacto visual que otros niños de su misma edad,pero este indicador solo es percibido para diagnosticar el
desarrollo del síndrome después de los dos años. Por lo general los padres se dan cuenta recién a esta edad.
Este factor radica en que los bebes miran más a los ojos que a cualquier otra parte del rostro, y el rostro más que a otra parte del cuerpo, siendo este un factor clave en la interacción social y su desarrollo.
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